La minería sostenible es necesaria porque impulsa la innovación en diversos sectores, nos facilita recursos estratégicos para el avance de la sociedad y contribuye a acelerar la transición verde fomentando las energías renovables, ya que el silicio que contiene el cuarzo se emplea en los paneles fotovoltaicos.
Desde el punto de vista de las nuevas tecnologías, es uno de los mejores conductores de placas electrónicas, por lo que se utiliza en las baterías recargables de iones de litio para teléfonos móviles, ordenadores y otras herramientas fundamentales en el día a día que permiten a ciudadanos de todo el mundo estar conectados digitalmente. Asimismo, es fundamental en el desarrollo de la fibra óptica y de equipos sanitarios.
Con el silicio se fabrican también las siliconas, que son compuestos sintéticos resistentes al calor y base de selladores, adhesivos, lubricantes industriales, aislamientos de edificios y del aluminio de puertas y ventanas. En los hogares: encimeras de cocinas, baños y distintos tipos de suelos. Y también para mejorar la eficacia de productos de cosmética e higiene personal.
Las siliconas han sido motor del progreso hacia la industria 4.0 por su uso en la impresión 3D, una técnica innovadora para la creación de prototipos, modelos a escala de piezas y productos finales para diferentes sectores, destacando el de la aeronáutica y la automoción. Impulsa la fabricación digital y permite métodos de producción más eficientes y sostenibles.